Como te imaginarás, los ingenieros tuvieron que instalar un sistema de cárter seco que elimina unos 150 mm en el borde del motor seis cilindros para que quepa en el auto. Pero esto no fue todo, también instalaron un kit turbo firmado por HKS, nuevo cigüeñal, bielas, intercooler e instalaron cilindros más grandes en el motor, con lo que la cilindrada pasó de 3.8 a 4.1 litros.
Gracias a estas mejoras el Toyota GT 86 ahora tiene para sí unos impresionantes 1.000 CV y tracción a las cuatro ruedas. El motor está asociado a una caja secuencial de 6 velocidades con embrague de carreras.
El auto va a ser usado en carreras de drift, por lo que también se instaló un kit aerodinámico, un capó de fibra de carbono, nueva suspensión y un diferencial trasero de 8.8 pulgadas de Ford y un nuevo sistema de escape firmado por EVO.