Sin lugar a dudas el nuevo Mazda MX-5 debe ser un auto super divertido de manejar, ideal para los fines de semana. Ahora bien eso es gracias a su tamaño (este MX-5 es más chico que las generaciones pasadas), a su ligereza (pesa 1.000 kg) y a su reparto de pesos de 50:50. Gracias a esta fórmula la marca japonesa se asegura que el auto tenga un desempeño óptimo, ágil y preciso.
Como las palabras se las puede llevar el viento, Mazda quiso demostrar que el reparto de pesos perfecto de 50:50 no es un invento. Es por eso que hace unos(con el piloto adentro) se sube a una balanza y muestra el equilibrio perfecto con el que cuenta.