La firma británica, que décadas atrás se dedicaba a poblar las carreteras con motocicletas, presenta ahora el Atom 3.5R, la última derivada hasta la fecha de este genial blipaza.
El corazón de este Atom sigue siendo un bloque Honda de dos litros, concretamente heredado del Civic Type R, pero convenientemente sobrealimentado, hasta permitirle erogar nada menos que 350 caballos a las ruedas traseras, a través de una caja secuencial Sadev de seis relaciones, idéntica a la empleada en el brutal Atom V8.
Costará alrededor de 100.000€, lo que lo convierte en una pieza de track day bastante inaccesible para el bolsillo medio, pero está claro que pocos aparatos ofrecen sensaciones y prestaciones dentro y fuera del circuito a la altura de este pequeño inglés, capaz de mojarle la oreja a cualquier superdeportivo del doble de precio sin problema alguno.